Boca 'e Loba entrevistó al escritor boliviano Juan Carlos Zambrana Gutiérrez, quien publicó su libro de cuentos titulado "Tarántula" (2021) con la Editorial 3600. La obra reuné once narraciones como "El juego del muñeco de trapo", "Magia perra" o el cuento "Tarántula" que da el nombre a esta publicación. Gutiérrez Zambrana conversó con nosotros acerca de su libro, sus preferencias literarias y los proyectos en los que se encuentra trabajando en la actualidad.
SOBRE EL AUTOR
Juan Carlos Zambrana Gutiérrez nació en Santa Cruz de la Sierra, Bolivia, en el año 1984. Es licenciado en Relaciones Internacionales, autor de varias decenas de artículos de opinión publicados en los principales medios de prensa escrita de su país. A finales del 2019 fue finalista del Concurso Municipal de Literatura ‘Franz Tamayo’, con el cuento Tarántula.
Boca 'e Loba (BL): ¿A qué edad te interesaste por la escritura? ¿Qué circunstancias te llevaron a hacerlo?
Juan Carlos Zambrana Gutiérrez (JCZG): Creo que la idea de ponerme a escribir me tentó desde que tuve uso de conciencia. De chico escribía los argumentos y los diálogos de mis historietas, luego las dibujaba. En el colegio le planteé a mi amigo Miguel Toledo que escribiéramos varios tomos de Historia universal de las guerras (él, mucho más juicioso que yo, se negó). A los 24 años, cuando ya llevaba tiempo entrenando con las pesas, leí Brother iron, sister steel, del fisicoculturista Dave Draper y quedé alucinando: ¡definitivamente quería escribir un libro como ese! Una tarde me senté en el kiosco del gimnasio a comer ensalada de frutas y cuando llegó mi corteja (novia), antes de saludarla siquiera, le dije que quería ser escritor. La noticia la dejó devastada, se dio cuenta de que esas palabras eran lo mismo que escuchar el silbato de un tren que ya había puesto su maquinaria en movimiento; mi relación con ella terminó, me cambié a Relaciones Internacionales en la universidad y un par de años más tarde empecé a publicar en medios de prensa escrita del país y de afuera (por ese entonces era mi padre quien me recomendaba a los editores de los periódicos).
BL: ¿Cuáles son l@s autor@s que influyeron en tu escritura?
JCZG: El principal de todos es Guillermo Arriaga. Todavía no logro recuperarme del impacto que su novela Salvar el fuego tuvo en mí. Esa obra es extraordinaria, llena de intensidad, de perspectivas distintas, de voces diferentes: unas que se expresan en el lenguaje de la calle y otras con un registro mucho más elevado. ¡La novela incluye un taller de escritura creativa ficticio! Arriaga pone a escribir a una docena de sus personajes, todos presidiarios. ¡Es sublime!
BL: ¿Qué autor@ bolivian@ recomendarías a los lectores extranjeros?
JCZG: Yo leo narrativa y, más que autores, recomendaría libros específicos, entre ellos: Para comerte mejor y Tierra fresca de su tumba, ambos de Giovanna Rivero; recomendaría también La composición de la sal, de Magela Baudoin; y, cómo no, Iluminación, de Sebastián Antezana. Son libros que leo y releo por el placer que me producen sus lenguajes, sus prosas, su profundo sentido literario.
BL: ¿Cuáles son los temas que inspiraron los cuentos de tu obra “Tarántula”?
JCZG: Bueno, podría cometer el error de decir que los temas son: la violencia juvenil, los linchamientos, la enfermedad mental, lo frágil que es la realidad bajo la influencia de las drogas, la vida en la calle, el hastío ante la rutina y una búsqueda de intensidad que atraviesa todo lo anterior. Sin embargo, como dijo en su momento Flannery O'Connor, estoy convencido de que para alcanzar una comprensión cabal de lo que son los temas de mis cuentos habría que valerse de todas las palabras que elegí y ordené en esos relatos, cualquier intento que haga de presentar los temas con menos palabras que las de mis relatos, acabará por ofrecer una idea pobre de mis cuentos, en los que se respira, se mata, se come, se tiene relaciones sexuales, se odia, se sufre y se intenta amar (el amor en Tarántula es algo que nunca se realiza).
BL: ¿Cuánto tiempo demoraste en escribir los once cuentos que componen “Tarántula”?
JCZG: Escribí 21 relatos en poco más de 2 años, 10 terminaron en la basura. O sea: logré componer un libro quemando el 50% de lo que escribí.
BL: ¿Qué encontrarán los lectores en “Tarántula”?
JCZG: Tarántula es expresión del desenfreno en las personas, de la animalidad humana, de eso que los antiguos griegos llamaban “lo dionisiaco”. Los lectores encontrarán una literatura cercana, sin impostura ni fingimiento, con personajes que no están pensados para agradar, sino para abrir las puertas de mundos particularísimos, con leyes y búsquedas propias, en los que se le seguirá el rastro a los conflictos hasta las últimas consecuencias. Las historias (e incluso la portada del libro: una tarántula enorme) tienen ese doble poder repulsivo/atractivo que es tan propio del ser humano, sobre todo en una época en la que se pretende suavizar toda estética. Mi libro gusta porque no pretende ser suave o agradable.
BL: ¿Nos puedes decir en qué proyectos literarios estás trabajando en la actualidad?
JCZG: Estoy embarcado en la “confección” de dos novelas, una que es la expansión del cuento Tarántula y otra que vendría a ser una forma muy loca de bildungsroman o novela de crecimiento, en la que un personaje adolescente afirma su identidad en el mundo.
BL: ¿Cómo podemos adquirir tu obra “Tarantula” en el exterior?
JCZG: Por ahora Tarántula se ha publicado en Bolivia, pero pronto tendré la alegría de ponerla a disposición del mundo entero, para que la puedan adquirir en su versión digital.